La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, ha visitado este viernes el nuevo espacio de participación comunitaria de Intras en Burgos. Allí ha puesto de relieve la figura del asistente personal, cada vez más extendida y demandada en la Comunidad. Se trata de un instrumento que, además de facilitar la vida a las personas con discapacidad o en situación de dependencia, supone un gran nicho de empleo.
El asistente personal es uno de los mejores recursos para que las personas con discapacidad o en situación de dependencia puedan afrontar su experiencia vital de acuerdo con sus propios objetivos, deseos, metas y, sobre todo, decisiones. Ayuda a mejorar la autonomía personal de los miembros de este colectivo y supone, además, un gran apoyo para el entorno familiar. En la actualidad, según datos con fecha de 31 de enero de este año, hay reconocidas en Castilla y León 2.284 prestaciones de este servicio, el doble que hace cuatro año, lo que coloca a la Comunidad en la segunda posición a nivel nacional.
Además, en plena consonancia con este nuevo texto legal funciona el espacio de participación comunitaria que ha puesto en marcha Fundación Intras en la capital burgalesa. Un nuevo modelo de centro de día plenamente abierto al entorno, cuyo objetivo es doble: por un lado, ofrecer a las personas con discapacidad servicios de apoyo y un gran número de actividades culturales y de ocio, como teatro, música, arte o deportes; y, por otro, promover la integración social de este colectivo, puesto que estas instalaciones están completamente abiertas a cualquier ciudadano burgalés.
Durante la visita, la titular de Familia ha sido testigo de varias de esas actividades que se llevan a cabo en el centro orientadas a las personas con discapacidad, como una demostración de la iniciativa «Asistencia personal con musicoterapia», una presentación de los programas «Anotadores», para que personas con discapacidad por malestar psíquico puedan ejercer como oficiales de mesa en partidos de baloncesto y «Mascotas virtuales», una simulación de animales reales pero digitalizados para que funcionen como soporte emocional o cómo la entidad prepara su propia línea de catering.
Se pretende que las personas del entorno participen, interactúen y disfruten de todas las oportunidades de ocio que se desarrollan en el centro y, de este modo, también las personas con discapacidad pueden intercambiar experiencias y espacios lúdicos con el resto de la sociedad.
Cabe señalar que la Junta de Castilla y León y la Fundación Intras mantienen una estrecha colaboración en el impulso de programas y servicios asistenciales y de apoyo a las personas con discapacidad y dependientes, así como han impulsado proyectos innovadores basados en las tecnologías más avanzadas para facilitar la vida a estos colectivos.