El presidente de la Diputación, Borja Suárez, junto con el delegado territorial de Burgos, Roberto Saiz Alonso, han asistido al acto de inauguración de la Unidad de Convivencia en la Residencia de Ancianos de Fuentes Blancas.
La reforma, que ha sido financiada íntegramente con Fondos Europeos, “es fruto de llevar a efecto intenciones”, ha señalado el delegado territorial, agradeciendo a la Diputación de Burgos su colaboración con la Junta de Castilla y león.
La nueva Unidad de Convivencia cuenta con 14 plazas adaptadas a un nuevo modelo de convivencia en los centros asistenciales que van a ser ocupados por los residentes de las diferentes residencias.
Para Borja Suárez, esta actuación es una muestra más del compromiso con las personas mayores y de la defensa de los servicios públicos vinculados a las personas mayores y el bienestar social que mantiene la Diputación.
El delegado territorial, Roberto Saiz Alonso, ha recordado que esta actuación es fruto de la firma de un convenio de hace dos años que permitió “instrumentar parte de los fondos de Next Generation de un total de 150 millones de euros”. Gracias a este convenio, se ha ejecutado esta actuación por parte de la Junta de Castilla y León, que elevó del 15% al 20% el presupuesto destinado para entidades locales, otorgando a la reforma de esta residencia un total de 479.000 euros.
Estas obras de reforma «modernizan los servicios sociales y los servicios asistenciales, y que comprometen la apuesta de una corporación local, como la Diputación de Burgos, por los servicios sociales en un debate permanente sobre quién tiene que ejercer la competencia”, ha concluido Borja Suárez.
Obras
Las obras se han desarrollado en el ala noroeste en la planta primera de la Residencia de Ancianos de la Diputación Provincial de Burgos.
Dicha ala fue utilizada por las Hermanas de la Caridad, “antigua comunidad religiosa” que colaboraba en la residencia. Tiene acceso desde el núcleo central de comunicación, dotado de escaleras, ascensores y montacamas y posee, adosada a fachada, una escalera de evacuación exterior en caso de incendio. La superficie construida reformada es de 441,36 m2.
En la misma zona existe un pasillo paralelo e independiente, que da acceso a las dependencias de médico, enfermera y botiquín de medicamentos. Se incluyó en el Proyecto la renovación de dichos espacios.
Las obras han supuesto la redistribución de esta ala, convirtiendo los 12 dormitorios individuales existentes en 7 dobles de mayor tamaño, que responden a las nuevas necesidades. Se crean 14 nuevas plazas para residentes. Cada dormitorio está dotado de baño interior accesible.
Se han mantenido la sala de estar, la cocina y el almacén de las religiosas, realizando ciertas labores de mejora de la eficiencia energética y de los acabados. Se han ejecutado nuevas instalaciones de agua, de electricidad, de calefacción y de telecomunicaciones. También se ha incorporado, en toda el ala, un sistema de ventilación con recuperador de calor.