Miles de burgalesas (y burgaleses) han salido a la calle un año más para celebrar el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La concentración convocada por los diferentes colectivos feministas de la ciudad de Burgos han llevado a las féminas a la calle para gritar muy fuerte ‘basta ya’ y exigir avances constantes en la igualdad real entre hombres y mujeres.
“Nos gustaría que este fuera un día más, pero mientras haya violencia machista y se mantenga a las mujeres en un plano desigual estaremos aquí para reivindicar”, explicaba Silvia Adrián Pérez, del Colectivo 8 de Marzo en la cabecera de la concentración. Una marcha en la que se colaron el debate sobre las implicaciones de la Ley del Solo Sí es Sí, las políticas implementadas por la Junta de Castilla y León desde la entrada de Vox en el Gobierno regional y, por supuesto, los insultos recibidos en el Congreso de los Diputados por la ministra de Igualdad, Irene Montero (Podemos).
“Es lamentable que sucedan estas cosas, que la ataquen simplemente por ser mujer como ya le sucedió a Bibiana Aído y a cada mujer con cargo de responsabilidad”, afirmaba Adrián. “No pueden soportar que una mujer tenga poder, va en contra de sus principios”, insistía.
En la misma línea, Laura Pérez, presidenta de la Asociación para la Defensa de la Mujer La Rueda, aseveraba que era imprescindible “seguir visibilizando todos los tipos de violencias que sufren las mujeres, que por desgracia no se limitan solo al seno de la pareja”, comenta. “Está también la violencia sexual, esa cultura de la violación en la que vivimos y normalizamos que tiene en la prostitución su máxima expresión, la mutilación genital que sufren mujeres en muchas partes del Mundo, los matrimonios forzosos, los abortos selectivos, el no respeto a la interrupción voluntaria del embarazo, la aparición de los vientres de alquiler… toda esta violencia estructural nos hace estar aquí”.
Realidades latentes que se contraponen con los discursos de quienes niegan la violencia hacia las mujeres y hablan de violencia intrafamiliar, equiparando los datos de agresiones hacia mujeres con los sufridos por varones o por hijos. “No se puede más que apostar por la educación, hay que educar a las nuevas generaciones y no consentir este tipo de ataques (los sufridos por Irene Montero) y diría que no darles publicidad”, considera Silvia Adrián. “Cuando alguien como el partido Vox niega la violencia de género, poco más se puede decir”, lamentaba, “salvo que estamos absolutamente en contra de estos mensajes y de las políticas que quieren aplicar: las mujeres estamos para algo más que tener hijos”.
Polémicas que se generan en un contexto de alza de las denuncias de violencia debido, afirman desde La Rueda, a que “las mujeres jóvenes cada vez denuncian más porque consienten menos lo que hemos tenido que tolerar durante siglos”, afirma. Pero que sufren también “mujeres mayores que han vivido y crecido en sociedad en la que les decían que tenían que aguantar”, advierte. “Son mujeres que se han cansado y que necesitan apoyos para dar el paso de denunciar y de buscar ayuda”, ha concluido Pérez.
Concentración institucional
Por la mañana, a mediodía, se han celebrado dos concentraciones paralelas en la ciudad. Por un lado, y convocada por los sindicatos CCOO y UGT, se han dado cita un centenar de personas en el Paseo Sierra de Atapuerca, mientras que frente a la Subdelegación del Gobierno una representación del Ayuntamiento, de la Delegación Territorial de la Junta, de las cámaras y de la Subdelegación, así como de las fuerzas de seguridad del Estado han mostrado su repulsa a los actos de violencia machista.
