Dos aficionados ultras del Burgos Club de Fútbol han sido detenidos. Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría Provincial de Burgos han arrestado en esta ciudad a otros dos varones, de 50 y 20 respectivamente, por su presunta participación en la riña tumultuaria previa al partido que disputaron en el mes de noviembre el Burgos CF y el Real Zaragoza.
Los altercados tuvieron lugar el domingo 27 de noviembre del pasado año en las horas previas a la celebración del encuentro cuando grupos de hinchas radicales de los dos equipos se enfrentaron y protagonizaron una riña tumultuaria en las inmediaciones del estadio El Plantío.
A raíz de esos incidentes, se inició una investigación y el pasado mes de enero se desarrolló una operación dirigida por el Juzgado de Instrucción número Dos de Burgos, coordinada por la Comisaría General de Información, en la que la Policía Nacional practicó 64 detenciones en distintas ciudades de la geografía nacional, entre ellas Burgos y Zaragoza, todas ellas de personas que presuntamente participaron de los Delitos de Riña Tumultuaria y Desórdenes Públicos.
Ahora, han sido detenidos dos ultras más del Burgos. En todo este tiempo, agentes de la Brigada Provincial de Información de Burgos han continuado realizando una importante labor de investigación, recabando pruebas y realizando numerosas gestiones policiales con la finalidad de identificar al mayor número de personas involucradas en los hechos, fruto de las cuales, se han llevado a cabo estas dos nuevas detenciones en Burgos.
Investigación abierta
La investigación sigue abierta y la Policía Nacional prosigue con las indagaciones oportunas, por lo que no se descarta que en breve se lleven a cabo nuevas detenciones. Uno de los detenidos cuenta con antecedentes por varios delitos y sanciones en materia de violencia, racismo, xenofobia e intolerancia en el deporte.
Es oportuno recordar la gravedad de los hechos, en los que se detectaron evidencias de una previa planificación. Algo más de medio centenar de personas, enfrentadas, haciendo uso de medios peligrosos suponen una grave amenaza para la integridad y seguridad ciudadana.