Joan Subirats, ministro de Universidades, ha visitado hoy la Universidad de Burgos, a la que ha destacado como «universidad de dimensión global con una importante vertiente internacional, pero que trabaja para transferir el resultado de su investigación en su entorno social», y se ha reunido tanto con el equipo rectoral, así como con los responsables de todos los centros, del alumnado y del personal docente e investigador y del de administración y servicios.
En ambas reuniones, así como en su comparecencia ante los medios de comunicación, Subirats ha abordado las principales novedades que para el sistema universitario español supone la entrada en vigor de la LOSU, fundamentalmente la inquietud creada por la no comprometida financiación que exige la nueva ley, al igual que el impulso que su ministerio pretende dar a la formación permanente y al refuerzo de los doctorados industriales.
En su intervención, el rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, señaló al ministro Subirats que «sin financiación las universidades no vamos a poder aplicar la LOSU y desde luego no lo va a hacer la Universidad de Burgos y quiero aprovechar la presencia del ministro para decir que es fundamental que las comunidades autónomas distribuyan la financiación estatal con un destino finalista y que se tengan en cuenta las peculiaridades de cada universidad. Hace mucho tiempo que hemos solicitado a la Consejería de Educación de la Junta que realice un estudio sobre lo que va a suponer la entrada en vigor de la LOSU y la necesidad de equilibrar el presupuesto de la Universidad de Burgos con la media del resto de universidades públicas de Castilla y León. La entrada en vigor de la LOSU es una oportunidad excelente para hacerlo».
Asimismo, Pérez Mateos puso en valor «la implicación de la UBU con su entorno más próximo», su reciente integración en la Universidad Europea RUN-EU y la intensa colaboración que la institución mantiene con el Ayuntamiento de Burgos «que intentaremos revitalizar e incluso ampliar con el gobierno municipal que salga de las urnas el próximo domingo».
«La Universidad de Burgos -enfatizó el rector- está muy bien posicionada en varias de las políticas del Ministerio, como es la del impulso de la Formación Permanente y tiene una firme voluntad de afrontar este tipo de docencia, así como de seguir potenciando nuestra habitual colaboración con entorno industrial y empresarial. En este sentido hemos aprobado la puesta en marcha de un plan de formación en microcredenciales en torno al hidrógeno verde, con una gran demanda por parte de empresas y profesionales».
En opinión de Joan Subirats, las universidades deben dotarse de «estructuras más flexibles y adaptables» para poder satisfacer las necesidades de formación de personas de todas las edades. Por ello, afirmó el rector, su Ministerio está impulsando las microcredenciales «con cursos que tienen entre 1 y 15 créditos, con certificaciones apilables que pueden llegar a constituir una nueva carrera formativa».
Igualmente, el ministro de Universidades aseguró que el ejecutivo de Pedro Sánchez «está en contacto con la Comisión Permanente CRUE para reforzar el compromiso del Gobierno de España en la financiación de las universidades públicas. La LOSU fija como objetivo de financiación para 2030 el 1% del PIB y ahora estamos en el 0,7% y estamos hablando de un aumento muy importante a conseguir durante los próximos 7 años, lo que nos colocaría en el promedio europeo». «Pero -aclaró Subirats- las competencias están en manos de las comunidades autónomas», responsables del 80% de la financiación del sistema universitario público, mientras que la financiación directa del Estado es del 8%.
«El dinero que aumente el Estado hacia las comunidades autónomas no tiene un carácter finalista y son las autonomías las que deciden como distribuyen ese dinero para Sanidad, universidades, al sistema educativo o al sistema social», sentenció Joan Subirats.