El Ayuntamiento de Burgos ha celebrado este viernes en la Plaza Santiago un homenaje a las 52 mujeres asesinadas en lo que llevamos de año, víctimas de la violencia de género.
De esta forma han inaugurado una exposición, enmarcada en la programación del 25N, que se prolongará hasta el 4 de diciembre. La muestra consta de medio centenar de carteles en las columnas del soportal de la plaza, con la silueta, el nombre y el origen de estas víctimas de la violencia de género y de sus hijos.
El objetivo es dar voz a estas mujeres y contar la realidad de esta realidad que es «perniciosa para la sociedad», tal y como ha señalado la alcaldesa, Cristina Ayala. «No queremos que sean mujeres anónimas», ha destacado.
Al mismo tiempo ha mostrado su preocupación por la actitud de los más jóvenes, cuyas conductas machistas «se han exacerbado a lo largo de los últimos años». De esta forma ha alertado del aumento de las denuncias, que en Burgos ascienden a 533, frente a las 445 registradas durante el año pasado.
Cristina Ayala ha destacado las políticas locales centradas en la «formación» de las mujeres maltratadas para que «puedan salir del ámbito de la violencia». El objetivo es que estas mujeres tengan «la confianza en sí mismas para salir de esta situación» y garantizar su «independencia económica».
En este sentido ha recordado que el Ayuntamiento firmó un convenio con la Universidad Popular para la Educación y la Cultura (Unipec) para impulsar cursos dirigidos a las víctimas de violencia machista.
Al acto han acudido representantes de las tres formaciones políticas con representación en el Ayuntamiento.