El Partido Castellano-Tierra Comunera (PCAS), denuncia públicamente el «uso caprichoso» que está realizando el alcalde de Burgos, Daniel de la Rosa, del suelo público de la ciudad, permitiendo a empresas privadas la realización de diferentes actuaciones, careciendo éstas de las licencias y permisos pertinentes. La formación hace referencia a las obras instalar los puntos de recarga para vehículos eléctricos que se reparten por distintos puntos de la ciudad y que, según advierten se acometen sin control ni supervisión municipal y «sin que desde alcaldía se realice ninguna acción, salvo aplaudir y avalar las actuaciones ilegales».
Según las fuentes consultadas por la formación castellanista, se están realizando acometidas, de más de medio metro de profundidad, rompiendo jardines y aceras, sin permiso ni licencia de la concejalía de Medio Ambiente, ni de ningún otro servicio técnico municipal.
«Sin duda el Alcalde, en periodo preelectoral, hace la vista gorda», advierte el presidente provincial del PCAS, Domingo Hernández, al tiempo que insiste en que “De la Rosa, está buscando la realización de alguna actuación que justifique sus casi cuatro de mandato, pues su bagaje es bastante pobre”. Sin embargo aclaran que a pesar de sus urgencias, «nada justifica no cumplir la legalidad».
De igual manera los comuneros burgaleses recuerdan a la corporación municipal que debe de dar ejemplo, cumpliendo las normas, no como hicieron con el cartel luminoso, del VIII Centenario, situado el balcón de la Casa Consistorial, que incumplía la norma, pero que el PSOE sólo denunció cuando estaba en la oposición.
Por último los castellanistas solicitan que se tenga en cuenta los requisitos necesarios para la realización de las obras, porque insisten, no se puede ignorar por intereses particulares la legalidad municipal, “y nos ningunee en busca de rentabilidad política”.