El Ayuntamiento de Burgos ha aprobado el pago de 3,8 millones al Consorcio de la Variante Ferroviaria correspondiente a la anualidad de 2022, después de que los bancos no hayan dado más plazo al pago que vencía este domingo. Para ello, se ha tenido que aprobar este reconocimiento extrajudicial de crédito que ha contado con los votos a favor del equipo de gobierno y la abstención de Vox y PP.
La portavoz de En Burgos Podemos, Marga Arroyo, ha vuelto a recordar que el Consorcio no funciona como debería y han llegado tres denuncias al Ayuntamiento como la de Torre Panorama y la de Residencial Boulevard y ha vuelvo a solicitar que se disuelvan ya que toda la gestión recae sobre el Ayuntamiento. Por ello fue el único grupo que votó en contra. Un aspecto que también ha reconocido el concejal de Vox, Fernando Martín, quién reconoció que es un tema que «no se ha gestionado bien» en esta etapa. Respecto a la posible disolución, el propio alcalde Daniel de la Rosa, reconoció que en caso de llevarse a cabo, las parcelas pasarían a ser patrimonio municipal y cambiarían su clasificación por lo que sería más difícil su venta.
El vicealcalde Vicente Marañón ha recordado que esta modificación presupuestaria era muy necesaria, pues en caso de no hacer ese pago a los bancos conllevarían consecuencias legales pero asumió que el Ayuntamiento no tiene «medios económicos ni humanos» llevar a cabo la venta de parcelas. Una idea reforzada por De la Rosa a pesar de que el Partido Popular le recordó que fue el alcalde quién comenzó el debate de su disolución.
Por su parte el Partido Popular señaló en palabras de su portavoz, Carolina Blasco, que se ha llegado a un momento en el que había que elegir entre «disolución o rescate» y se ha optado por la segundo. El PP se mostró de acuerdo con esta decisión, era necesario hacer ese rescate y pidió más transparencia y haber dado al Consorcio el dinero con anterioridad. Su abstención se tomó como «un apoyo desde la distancia» y reiteró que «el ejecutivo ha gestionado mal».
También se ha aprobado con los votos a favor del PSOE y Ciudadanos la quinta modificación presupuestaria por un importe de 50 millones después de que se haya desestimado las reclamaciones presentadas por el PP. Su portavoz, Carolina Blasco ha criticado que a estas alturas de 2022 se esté debatiendo esta modificación y ha señalado que el Presupuesto de 2023 «está petado».
Estas alegaciones pedían que se retirasen 1,8 millones y se destinasen a la compra de cinco autobuses y se contemplase llegar a un acuerdo con la operativa de vuelos Ryanair. El concejal de Hacienda, David Jurado, ha criticado «el oportunista» debate suscitado por el PP que a su juicio «solo ha servido para retrasar la modificación»